jueves, 26 de abril de 2012

Dream Act: Nuevas oportunidades para los indocumentados

Número 26/ enero-abril 2012
Sofía Sánchez

Las elecciones presidencias de los Estados Unidos representan una gran oportunidad para los hijos de indocumentados. Con las nuevas reformas en las regulaciones inmigratorias, los sueños de adquirir una educación universitaria y salir adelante en su país adoptado, se pueden volver una realidad. El futuro de la inmigración y el progreso que los ciudadanos indocumentados ofrecerán al país, está en las manos de los departamentos legislativos de los Estados Unidos.

Con la nueva introducción del proyecto, Dream Act, estado por estado se han visto varias manifestaciones de parte de la comunidad hispana. Junto con el inmenso apoyo de esta comunidad existe el resentimiento de ofrecer beneficios federales a residentes que no forman parte formal del país, causando mucha controversia en aspectos culturales y financieros.

U.S. President Addresses General Assembly . Source: UN





El Dream Act se enfoca en apoyar los inmigrantes indocumentados, quienes llegaron a este país como menores y sin voluntad. Atados de la mano de sus padres, heredaron el título de "ilegal".

Aunque se sienten completamente americanos al ser criado en los Estados Unidos, les falta un estatus legal para realmente formar parte del país. Piden el apoyo  del gobierno federal para darles la libertad de perseguir una educación universitaria y salir adelante. El Dream Act es un programa comprensivo que ofrece  la oportunidad de asistir a una universidad pública, solicitar recursos financieros y cualificar para una residencia condicional (1).

El proyecto varía dependiendo del estado y los recursos que se pueden asignar a la comunidad indocumentada. Cada estado tiene su propia perspectiva, la cual refleja las tensiones culturales de esa demografía y el rol de los indocumentados. Los estados más avanzados en la aprobación del Dream Act son California, Nuevo México y Texas, que consiguientemente son los que tienen una población dominante de inmigrantes indocumentados.

La Dream Act: ¿Qué ocurre con la financiación de los estudios?


California es uno de los estados en que se ha visto un apoyo inmenso. Estudiantes indocumentados pueden asistir a universidades públicas y cualifican pagar la matrícula de residentes del estado. En otros estados estos estudiantes pagan la matrícula de no-residentes o extranjeros, que es aproximadamente el tripe de lo que paga un estudiante residente de ese estado.

Otro aspecto sobre la matriculación de estudiantes indocumentados es el tema de los recursos financieros. Hoy en día se limitan las fuentes en donde estos estudiantes pueden solicitar ayuda financiera, particularmente restringiendo el apoyo del gobierno. En estados como California, estudiantes indocumentados pueden recibir ayuda de fondos privados, becas y préstamos.

Este tema atrae mucha controversia por el temor de que se agoten los recursos ofrecidos a ciudadanos americanos. Estudiantes americanos se preocupan por la habilidad del gobierno a repartir sus recursos. Temen que al apoyar a estudiantes indocumentados, caerán del puesto de prioridad en los ojos del gobierno estatal. Las controversias financieras también involucran ciudadanos que pagan impuestos.

La realidad es que al ofrecer recursos adicionales a la población indocumentada, estos ciudadanos verán un incremento en la cantidad de impuestos que tendrán que pagar, dinero alocado a servicios federales.  Por este motivo, se ha visto una división cultural entre los ciudadanos americanos y la comunidad indocumentada.
Particularmente en el estado de Alabama, estas tensiones son aún más intensas gracias a las nuevas reformas en las leyes inmigratorias. En este estado se ha aprobado una ley que requiere que todos los ciudadanos carguen formas correctas de identificación, un esfuerzo para reconocer quién es indocumentado.

Recursos universitarios resultan ser otro tema de discusión a nivel nacional, ya que hay puestos limitados en cada universidad. A las universidades públicas les cuesta funcionar a máxima capacidad porque dependen de la ayuda financiera del estado para administrar los programas ofrecidos. Abogados en Orlando han notado este obstáculo en cuanto a fondos para la ayuda financiera estatal, recursos públicos que en los últimos años han sido reducidos mientras los precios de matriculación siguen subiendo (2).

Aumenta la competencia en las universidades estadounidenses


Estudiantes indocumentados tendrán que competir con ciudadanos americanos para los puestos universitarios. Para evitar futuros conflictos culturales, el Dream Act necesita especificar que el estatus legal no afectará la probabilidad de ser aceptado a una universidad. Ciudadanos y indocumentados tendrán que competir basado solamente en méritos académicos.

El último aspecto de este proyecto tiene que ver con el estatus legal de estos estudiantes necesitados. Intenta ofrecer una solución al dilema de que aunque estos estudiantes adquieran licenciaturas universitarias, no tienen el permiso de trabajar dentro del país y poner los estudios en práctica.  La solución es una residencia condicional. Al terminar los estudios universitarios o sacrificar dos años para servicio militar, jóvenes indocumentados cualificarán para esta residencia, la cual se vence en seis años con limitaciones en tiempo que uno puede viajar fuera de los Estados Unidos. Después de los seis años, estos cualificados pueden solicitar residencia permanente y eventualmente la ciudadanía estadounidense (1).

Esta residencia condicional representa  una oportunidad increíble para todos los inmigrantes de los Estados Unidos. Estas nuevas reformas tendrán un impacto inmenso en aquellas personal al extranjero que desean venir a este país para vivir una vida diferente. En estos momentos no se puede determinar los siguientes pasos después del vencimiento de la residencia condicional ni cómo los Estados Unidos bajarán las barreras de inmigración. Lo que sí es claro es que el proyecto del Dream Act representa un sueño hecho realidad para familias indocumentadas.
El impacto del Dream Act se extiende en el progreso de país como tal, mejorando la economía, nivel de innovación y aportando a las futuras fuentes de ingreso nacional. Al aceptar más estudiantes universitarios, el país estaría invirtiendo en un futuro progresivo. Más títulos universitarios equivalen a más profesionales y el incremento de ingresos en el país.

Las elecciones presidenciales le han dado gran importancia a las reformas inmigratorias. La administración de Obama está intentando revivir el Dream Act dentro del Congreso, quien ha rechazado el proyecto dos veces. En estas últimas semanas el Presidente  Obama ha cambiado las normas de deportación a tener más tolerancia en casos de inmigrantes quienes asisten a universidades, han ofrecido servicios militares o están embarazadas. Ha pedido que los casos de deportación se prioricen basados en el record criminal de cada persona (3). Aunque ha causado aún más controversia para el Dream Act, la comunidad hispana he demostrado su apoyo.

El futuro de los jóvenes indocumentados es desconocido. Las reformas que ofrece el Dream Act, afectará al país drásticamente. Es importante tener en cuenta los procedimientos que ocurrirán después de su implementación, incluyendo tensiones culturales, olas de inmigración y el posible agotamiento de recursos federales.

Sofía Sánchez
Escritora

Bibliografía:

RODRIGUEZ, María, Quiénes son los dreamers-Información de la Dream Act, http://inmigracion.about.com/od/preguntasfrecuentes/a/Qui-Enes-Son-Los-Dreamers-Informaci-On-De-La-Dream-Act.htm
MCBRIDE, William, Immigration Blog, http://www.abogadowilliam.com/
GUTIERREZ, Rep. Luis, Are President Obama's Deportation Changes Real?,  Huffington Post, 2012, http://www.huffingtonpost.com/rep-luis-gutierrez/are-president-obamas-depo_b_1338551.html

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