jueves, 16 de diciembre de 2010

"Hay que apropiarse de la Democracia y Resignificarla"

Número 22/octubre-diciembre 2010
Lic. Pablo A. Gambandé

El Viceministro de Relaciones Exteriores ecuatoriano Sr. Kintto Lucas disertó, el pasado jueves 25 de Noviembre en el auditorio "Juana Azurduy" de la Universidad Popular de las Madres de Plaza de Mayo (UPMPM), sobre los sucesos ocurridos en Ecuador el día 30 de septiembre de 2010.

Se presenta un resumen de lo trasmitido por el vicecanciller quien inició su exposición con un video sobre los acontecimientos ocurridos ese día en el Ecuador, los cuales llevaron a la sociedad ecuatoriana y a la comunidad internacional a un debate sobre si se trató o no de un "intento Golpe de Estado" o fue un "atentado contra el orden democrático, la institucionalidad democrática y el estado de derecho".

El vicecanciller, luego de agradecer a las Madres de Plaza de Mayo, recordó que él tiene una sobrina desaparecida y a partir de ahí comenzó a describir los hechos de lo que definió como un intento de Golpe de Estado.

La posición del representante del gobierno ecuatoriano dejó en claro que la intención de sectores opositores y extranjeros era "desconocer al gobierno y crear un vacío de poder". Vacío de poder que esa misma noche sería legitimado sólo por los asambleístas "de la oposición" en el seno de la Asamblea Nacional (Función Legislativa) dado que habrían sido los únicos autorizados a ingresar a la Asamblea ese día por policías rebeldes.

Esa sería la causa principal que percibió el presidente Rafael Correa y fue la que lo llevó a enfrentar directamente a miembros de la Policía en huelga.

Junto a esa idea se trasmitió la creencia de que "otros presidentes derrocados en Ecuador se quedaron en Carondelet y fueron derrocados", Correa sabía eso y por eso actuó.

Encuentro del Secretario General de la ONU con el Presidente de Ecuador en Cancún, en la Conferencia sobre Cambio Climático. Fuente: UN Photo/Paulo Filgueiras

Así, se justificó el accionar del presidente y se definió el intento de golpe porque a la mañana del día 30 de septiembre, en la zona donde más tarde sucederían los hechos, se vieron francotiradores apostados en la terraza y porque se identificaron miembros de la oposición durante la manifestación. Sumando luego los hechos violentos ocurridos en el canal público, el cual trasmitía por cadena nacional (por orden presidencial) los acontecimientos "golpistas" y las protestas en otras ciudades y sectores de Quito.

A esos hechos, agregó la existencia de advertencias previas de lo que ocurriría en Ecuador. Como fueron las denuncias en organismos internacionales respecto a que el Gobierno ecuatoriano no es democrático.

Se mantuvo la versión de la gestación del plan golpista por parte de Lucio Gutiérrez (Ex militar y presidente ecuatoriano). Quien según el viceministro, se habría reunido con Carlos Alberto Montaner (Columnista del Nuevo Herald, exiliado cubano que hoy vive en España), con un ex Jefe de Inteligencia del ex presidente ecuatoriano León Febres Cordero, con un tal Roberto Salinas (quien sería ex banquero ecuatoriano y actual refugiado estadounidense) quienes junto a opositores venezolanos y con cubanos exiliados que viven en Miami habrían planificado el Golpe. Aquí hizo un alto y detalló que hoy esas reuniones se mantienen.
Para el Viceministro la solución al "Golpe de Estado" se dio porque: 1) El Gobierno tuvo al pueblo; 2) El Gobierno tuvo el apoyo internacional y 3) Las Fuerzas Armadas y algunos miembros de la Policía fueron leales.

Consideró que lo ocurrido fue un aviso de la oposición que fue: "estamos aquí" detallando luego que habrían sumado el accionar de organismos de inteligencia extranjeros. Sin nombrar cuales.

Así, y como enseñanza de lo ocurrido, el gobierno ecuatoriano habría aprendido que: 1) no se cerró el ciclo golpista en América Latina; 2) la derecha tratará de desprestigiar a los gobiernos progresistas; 3) hay que organizarse socialmente para repeler otros intentos de golpe y que hay que poder convocar más rápidamente; y 4) deben existir más alianzas sociales pro gobierno.

Más allá de las lecciones aprendidas y en la práctica, el intento de Golpe de Estado puso al gobierno en "un punto de inflexión" y se repreguntó sobre los cambios realizados y pretendidos. Sostuvo que tenemos que profundizar aún más en ciertos cambios. Entre los que resaltó el inicio de la revolución agraria y la construcción de nuevos frentes sociopolíticos.

En este punto, el viceministro inició el análisis de la relación Gobierno-Indigenismo, haciendo referencia al "Sumak Kawsay" o "buen vivir" de origen ancestral y hoy principio constitucional ecuatoriano que mantiene a la sociedad indígena enfrentada con el gobierno por la forma de alcanzar ese tan anhelado Buen Vivir.
Justificó la posición del gobierno respecto a la explotación de los recursos naturales, principalmente el agua y el petróleo, con la idea de que: "si no sacamos el petróleo ¿cómo cambiaremos la matriz?" en referencia al modelo económico-productivo para recordar la "aparición" de numerosas ONGs financiadas por la USAID (Agencia del gobierno estadounidense) y otras empresas y organismos estadounidenses.

Volviendo a recordar que durante los hechos del 30 de septiembre se identificó "algo más que un mero reclamo salarial".

Para el "Servidor Público" ecuatoriano, América Latina debe profundizar los cambios en el sentido de que "hay que apropiarse de la democracia y resignificarla" y que "hay que construir ciudadanía participativa" para que sean sujetos de derecho con participación social.

Volviendo a la relación Gobierno-Indigenismo, el viceministro declaró que existen ciertos problemas con los indígenas. Problemas que son menores y que "ellos" (los indígenas) mantienen una crítica constructiva contra el gobierno, la cual fue posible identificar por el gobierno dado el rechazo indigenista al intento de Golpe de Estado.

A ello agregó, que los asambleístas pertenecientes a la Pachakutic (no la nombró sino que hizo referencia) se han apartado de sus representados dado que algunos líderes han sido educados en Alemania o Estados Unidos.

Y por último, respecto a este tema, dio a entender que el gobierno ecuatoriano sabe que sin el apoyo del movimiento indígena no se podrá concretar la Revolución y que los indígenas saben que el gobierno no es el enemigo.

Al ir finalizando la presentación habló sobre "la construcción nacional hacia el socialismo" como camino para convertir la democracia. Agregando detalles de la revolución agraria, creación de "comités de revolución ciudadana" y la necesidad de que el movimiento Alianza País requiera nuevas estructuras socio-políticas.

Finalmente agradeció al Gobierno Argentino, a las organizaciones sociales que participaron y en particular a Néstor Kirchner y se abrió un espacio para preguntas.

Como conclusión obvia creo que el Sr. Kintto Lucas ha presentado la historia oficial sobre los hechos ocurridos ese día triste para la historia ecuatoriana. La versión de un Gobierno socialista que, a pesar de todo lo que ha hecho por los más pobres en su país, está sufriendo el necesario equilibrio que permite la "libertad" que brinda la democracia. Libertad que ha sido empleada (y mal empleada por algunos ese 30 de septiembre) por los sectores opositores en su búsqueda por mantener sus espacios... o acaso ¿qué harían los actuales oficialistas ecuatorianos cuando ya no fueran gobierno?

Luego de los seres humanos muertos y heridos durante esos acontecimientos, lo más triste y preocupante es la falta de una versión oficial final (escrita y publicada) que sea realizada en el seno de la Asamblea Nacional, con miembros de la oposición y del oficialismo, y no sólo a nivel de una Fiscalía. A la cual, sería bueno agregarle una investigación más sudamericana realizada en el seno de la UNASUR. (Para mi sorpresa, el presidente ecuatoriano solicitó, el 26 de noviembre a la Unión, dicha investigación).

A pesar de esa apertura mostrada por el presidente, la actualidad ecuatoriana comienza a traer a la memoria cierto ruido de animales descritos por George Orwell cuando, en momentos de transformación política, la verdad y los términos sufren "resignificaciones". Creo que los conceptos de verdad y democracia son únicos. Lo único que se resignifica son los hechos... y cada uno de nosotros conocemos nuestras responsabilidades y consecuencias de nuestros actos sobre la vida y el bienestar de otros seres humanos.
Rafael Correa ¿es o fue? un gran hombre, pero por la forma en que participó en los acontecimientos del 30 de septiembre de 2010 ya no es el mismo. La evasión de su responsabilidad directa en los resultados es injustificable. Hoy es un hombre político necesario en su patria y en un movimiento ideológico que trasciende fronteras y que esta creando la "patria grande" pero también hay que considerar que en una democracia la alternancia es una cualidad loable. ¿O acaso no hay tantos buenos políticos ecuatorianos?

Concluyo con un último pensamiento sobre la libertad de expresión, la cual nos ha permitido ver desde "varias ópticas" lo ocurrido en Ecuador y no solo desde la óptica oficial que por cuestiones de seguridad del Estado pretendió ser la única voz emisora empleando el poder legal gubernamental.

En Latinoamérica o cualquier país del mundo debemos ser ciudadanos libres "realmente" más allá de si participamos o no en las cuestiones políticas de la sociedad o sino... ¿para qué queremos Estados fuertes?

Pablo A. Gambandé
Es Licenciado en Relaciones Internacionales y director del Observatorio de Ecuador del Centro Argentino de Estudios Internacionales (CAEI).


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