Número 10/Agosto-Septiembre 2008
Raylsiyaly Rivero
La situación actual de Venezuela ha estado bajo el espectro mundial los últimos años, producto de la situación que ha venido sobrellevando el país. Los procesos electorales llevados a cabo, han sido indiscutiblemente determinantes para sentar las bases políticas y democráticas por las que el país colinda hoy en día. El próximo 23 de noviembre, la sociedad venezolana será llamada nuevamente a las urnas electorales, pero esta vez para elegir a las autoridades municipales y estadales. En estos comicios se espera que los partidos opositores midan su alcance político con el partido oficialista PSUV (Partido Socialista Único de Venezuela), pero más directamente con el Presidente Chávez, luego de haber perdido el proceso electoral que proponía una Reforma Constitucional en diciembre de 2007.
El Consejo Nacional Electoral (CNE) cumplirá nuevamente con su función de arbitraje. La presidenta del CNE, Tibisay Lucena declaró durante una conferencia de prensa el pasado 5 de junio, que la institución ha buscado asegurar la transparencia del proceso que ha sido cuestionada por la oposición venezolana, como poco neutral. Sin embargo, la confianza en el ente electoral debe haberse fortalecido, después de que se pronunciara por primera vez en contra de la administración del Presidente Chávez el pasado diciembre. El CNE ha buscado las mejores vías para mejorar el sistema de votación, entre las que se incluyen la renovación y depuración del Registro Electoral, el fortalecimiento del proceso de auditoría de los votos (Resolución N° 061011-873 del CNE) y la transmisión adecuada de los datos que permite el recuento de los votos. La correcta implementación de estas medias será lo que definirá si el ente comicial estará apto para garantizar la práctica democrática en el país.
La oposición: Unificación e inhabilitación
Las tensiones políticas en Venezuela en la víspera de las elecciones regionales se han intensificado y con ellas la ejecución de campañas de los partidos políticos, que buscan ganar adeptos para sus candidatos. Por otra parte la formación del Partido Socialista Único, que ocurrió a través de la fusión de los partidos seguidores del Presidente Chávez en el año 2007, ha llevado al sector opositor a converger en un “Pacto por la Unión”. Este pacto estipula que para cada gobernación o alcaldía, se nominará tan sólo a un candidato para adversar a los candidatos del PSUV. El acuerdo se mantendrá vigente hasta el día de las elecciones.
Por otra parte, los partidos opositores cuentan con una larga lista de elementos que trabajan en contra de sus esfuerzos por prevenir que el oficialismo gane las candidaturas, entre ellos la poca unidad en cuanto a la selección de los aspirantes, la incongruencia en el proceso de selección de candidatos, que sólo ha involucrado a la sociedad venezolana a través de encuestas que miden su popularidad. Mientras que el PSUV, ha sometido a votación la selección de los candidatos propuestos por el Presidente. Este proceso ocurrió el 1 de junio de 2008 y el gobierno se pronunció con respecto a éste como “una demostración de verdadera democracia”.
Dichas debilidades no son el único inconveniente que presenta el ambiente político venezolano, las Inhabilitaciones Políticas de varios de los candidatos importantes que adversan al oficialismo, impuestas por el Contralor General de la República, Clodosbaldo Russián. El Contralor tiene a su cargo el control y vigilancia de los bienes de la nación, así como la inspección y evaluación del ejercicio de los funcionarios públicos. Partiendo de esta premisa, la Ley Orgánica de la Contraloría General en el Artículo 105, sostiene que las inhabilitaciones políticas son una atribución del Contralor para imponer una sanción administrativa, como medida correctiva a los agravios que pudieran cometer los funcionarios públicos durante el ejercicio de sus funciones. Al mismo tiempo, la Carta Magna venezolana indica la necesidad de que se dicte una sentencia firme para la aplicación efectiva de este tipo de sanciones.
La tan criticada postura del Contralor Russián, fue respaldada por la Contralora del estado Táchira (al occidente del país), en unas declaraciones sostenidas el pasado 18 de julio, en donde aclaró la legalidad de la medida tomada.
Por otra parte, el ex presidente de la Cámara de Diputados del antiguo Congreso, Ramón Guillermo Acevedo, manifestó que sería conveniente que los candidatos en la lista de inhabilitaciones retiraran sus candidaturas, para evitar el debilitamiento de la unidad opositora al gobierno.
Una controversia considerable se ha sobrevenido sobre la población venezolana, debido a las inhabilitaciones, surgiendo cuestionamientos sobre el uso de las medidas correctivas como una herramienta política para reducir a los candidatos del sector opositor.
A pesar de la situación, los candidatos inhabilitados como Leopoldo López, Enrique Mendoza y Enrique Capriles Radonski continúan el proselitismo político para las elecciones de noviembre, sin tener certeza del alcance de sus acciones. Los correctivos administrativos que se están llevando a cabo y la manera en la que estos candidatos están enfrentando la situación, pueden verse como una profunda debilidad, especialmente para un grupo de políticos que busca ganarle escenario al Presidente Chávez.
Los retos del oficialismo
El nuevo período electoral presenta un momento determinante para Venezuela, un país que se enfrenta a una crisis generalizada, en donde el desabastecimiento de los alimentos básicos, las altas tasas de inflación y el desempleo son los principales contribuyentes. Estas son unas condiciones peligrosas para la llamada “Revolución Bolivariana” ubicando al PSUV en una posición difícil ante las elecciones venideras.
Los sectores menos privilegiados de la sociedad, han empezado a manifestar su descontento hacia la ardua situación que ha plagado al país desde comienzos del año en curso. Dichas manifestaciones se han dado a conocer popularmente, a través de noticieros y programas de opinión generalmente a través de canales con tendencia opositora (La Entrevista en RCTV, Aló Ciudadano en Globovisión, por mencionar algunos).
La falta de eficiencia que pudieran tener las medidas tomadas por el gobierno para atacar dichos problemas, hará que la imagen de los candidatos del PSUV sea menos atractiva para los electores.
En términos de seguridad se han tomado varias acciones en lo que va de año. Una de ellas fue la creación de un cuerpo nacional de seguridad a través de la “Ley de Policía Nacional” que busca mejorar el servicio policial en el territorio venezolano. Esta ley significa un paso importante hacia la consolidación de las estrategias del Presidente Chávez, en su búsqueda por la seguridad social.
Para atenuar el desabastecimiento de alimentos, el gobierno ha reforzado los mercados populares llamados “Mercal”, incrementando el suministro de productos que estos proveen a la población. Por otra parte el sector oficial ha exhortado a que el sector industrial aplique estrategias similares a las implementadas por este. Incentivar la ganadería y la agricultura, ha sido una de las más fuertes acciones del gobierno bolivariano, a través de la creación de préstamos que permiten acceder a los medios de producción necesarios para desarrollar dichas actividades.
Lo que respecta a la situación inflacionaria, Venezuela ha estado enfrentando problemas serios, especialmente después de que el Presidente de la República en uso de sus facultades introdujera el Decreto con rango Valor y Fuerza de Ley de Reconversión monetaria, efectivo para el 1 de enero de este año. Dicha medida arrastró el aumento de la cifra inflacionaria durante el primer trimestre del año, gracias al efecto inercial con el que los comerciantes aumentaron los precios en el último período del año 2007.
Hasta el momento la acción económica que ha tenido repercusiones directas sobre la sociedad es el aumento del sueldo mínimo, Chávez sostiene que por ahora, esta medida es más importante que el control inmediato de la inflación. De cualquier manera nos preguntamos, cómo el incremento de los salarios puede ser efectivo si los precios continúan subiendo descontroladamente. ¿Cómo ayuda esta política a Venezuela y a su desarrollo económico? Recientemente, el ejecutivo se pronunció a través del Informe Semestral sobre Economía Nacional, Mercado Petrolero y Geopolítica Internacional del Ministerio de Energía y Petróleo, exponiendo que la inflación incontenible necesita un mayor esfuerzo por parte del gobierno nacional.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística de Venezuela, la tasa de desempleo durante el pasado mes de junio fue de 7.6%, número que ha venido fluctuando durante los últimos años. Para afrontar la situación, el gobierno ha creado fuentes alternativas de trabajo (como grupos de personas que limpian las calles) que poco ayudan a mantener las necesidades de una familia media. La creación de trabajos que realmente producen lo necesario para sostener una vida digna, son elementales para impulsar el desarrollo de un país.
Es necesario que el Presidente y su grupo de trabajo ataquen el problema inflacionario y sus implicaciones, de manera inmediata, por la influencia de la situación sobre las elecciones regionales, sin mencionar el bienestar del país.
Indiscutiblemente es el momento clave para la implementación de medidas efectivas y duraderas para paliar la crisis que amenaza Venezuela. Medidas a corto plazo solo servirían para contribuir con la mentalidad conformista del ciudadano que no piensa en la preservación y sostenibilidad sino en el beneficio inmediato. Las estrategias económicas no deben demorarse en ser aplicadas, y deberán ser más efectivas que el aumento de salario. El gobierno y su partido deben demostrar que trabajan honestamente por el bien máximo del país y no por la persecución de un ideal político.
La popularidad de cualquier gobierno no depende de sus acciones y programas destinados a mejorar las vidas de sus nacionales a los que representa. La administración de Chávez ha buscando completar esta tarea, pero las medidas tomadas han sido dirigidas únicamente hacia un sector específico de la sociedad y no hacia la sociedad como un todo.
Los candidatos por el partido oficialista tienen la responsabilidad de proponer políticas que involucren a todo el pueblo venezolano, si desean alcanzar el éxito en las próximas elecciones. Es necesario que presenciemos una diversidad de acciones de gobierno para asegurar la confianza de la población y llevar a cabo un proceso electoral democrático.
Raylsiyaly Rivero
Universidad Santa María, Caracas (Venezuela).
Bibliografía:
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Louis W. Goodman, Johanna Mendelson Forman, Mosiés Naím, Joseph S. Tulchin and Gary Bland, “Lessons of the Venezuelan Experience”, 1ra edición. Washington D.C.: Woodrow Wilson International Center for Scholars 1994.
Klisberg, Bernardo y Tomassini, Luciano. “Capital Social y cultura: claves estratégicas para el desarrollo” 1ra edición. Argentina: Fondo de Cultura Económica 2000.
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