viernes, 15 de febrero de 2008

El Pakistán actual

Número 7/febrero-marzo 2008
Salman Ali

Pakistán existe desde el 14 de agosto de 1947 cuando los musulmanes gobernados por los británicos dueños del subcontinente indio, se reunieron en torno al Quaid-e-Azam (1) Mohammad Ali Gina para crear un territorio separado.

Pakistán se llamó constitucionalmente la República Islámica de Pakistán con la mayoría de la población musulmana. Sin embargo se adoptaron medidas específicas en la constitución para asegurar la protección de los derechos de las minorías en el país. Urdu es el idioma nacional y la población actual estimada es de 165 millones, las ciudades más importantes son Karachi Lahore e Islamabad.

Pakistán está en una posición geoestratégica importante, limítrofe con Irán en el oeste, Afganistán en el noroeste, China en el nordeste, India por el este y el mar arábigo en el sur. La extensión total del territorio es de aproximadamente 803.940 kilómetros cuadrados.


Desde su creación, Pakistán e India nunca tuvieron una relación saludable y entraron en disputa por la región de Cachemira, la cual era un estado independiente cuando se realizó la partición y siguiendo el criterio de la división de los estados según las características de la población, debido a la mayoría de la población musulmana en dicho estado debería pertenecer a Pakistán pero el rey de Cachemira decidió unirse a la India aunque en 1940 el 94% de la población censada en el país era musulmana. El gobierno llevó el asunto a las Naciones Unidas y se decidió que la población de Cachemira tenía el derecho a la autodeterminación por lo tanto debería llevarse a cabo un plebiscito. Los países entraron en guerra en 1948, 1965 y 1971 pero el asunto todavía está sin resolver. Actualmente ambos países disponen de armamento nuclear.

La política exterior pakistaní ha estado marcada por los problemas con la India así como por los esfuerzos para maximizar el apoyo externo, sus relaciones con Occidente, particularmente con los EEUU eran de gran importancia lo que llevó a Pakistán a jugar un papel muy activo en la región durante la Guerra Fría. Pakistán también ha establecido fuertes vínculos con China y durante 60 años su amistad ha perdurado en el paso del tiempo.

Otro aspecto importante de la política exterior de Pakistán ha sido su relación con los países islámicos lo que le ha llevado a ocupar una posición importante en la Organización de Países Islámicos (OIC). Pakistán ha establecido lazos de unión fuertes especialmente con los países islámicos de Oriente Medio.

El la era posterior al 11-S el presidente de Pakistán Musharraf cambió la orientación de su política exterior y se convirtió en un gran aliado de los EEUU en la guerra contra el terrorismo lo que ocasionó la caída del régimen talibán en Afganistán y luego la eliminación de Sadam Hussein de Irak. Aunque esto ha convertido al país en objetivo de las fuerzas antiamericanas, Pakistán permanece firme en su compromiso con la guerra contra el terror. Esto ha provocado un cierto descenso en la tensión entre la India y Pakistán porque de cierta manera el mundo civilizado tiene ahora un enemigo común.

Un aspecto importante de la historia de Pakistán has sido su lucha por la democracia ya que el país ha estado gobernado por militares durante la mayor parte de su existencia. El país fue dirigido por el General Zia-ul-Haq desde 1979 hasta 1987 cuando murió en un accidente aéreo. Un periodo breve de gobiernos democráticos con Benazir Bhutto (PPP) y Nawaz Sharif de la Liga Musulmana, los dos tuvieron oportunidades como primeros ministros elegidos y los cuatro gobiernos fueron finalizados bajo los cargos de corrupción. El actual presidente el General (retirado) Pervez Musharraf llevó a cabo un golpe militar pacífico en 1999 y el entonces vigente Primer Ministro Nawaz Sharif se exilió durante 8 años, la entonces líder de la oposición Bhutto se exilió hasta su vuelta en octubre de 2007.

El Jefe del Ejército el general Pervez Musharraf llevó a cabo un referéndum en 2002 y debido a los polémicos resultados ocupó el cargo de Presidente en 2002 durante 5 años y más tarde organizó las elecciones en el país donde los dos ex primeros ministros no estaban autorizados a participar por lo que el resultado fue un gobierno democrático con un gran falta de independencia, cuyas decisiones todavía eran adoptadas en la oficina del Presidente o Jefe del Ejército.

El país atravesó por un periodo de disturbios cuando en marzo de 2007 el General Musharraf intentó forzar al Jefe de Justicia de la Corte Suprema a presentar su dimisión, debido a su negativa éste fue suspendido del cargo y fue interpuesta una queja formal contra él en el Consejo Judicial Supremo (SJC) (2). Estas actuaciones fueron duramente contestadas por las organizaciones de abogados y activistas de derechos humanos del país. Más tarde el Consejo Judicial Supremo restituyó al Jefe de Justicia en su puesto y todos los cargos interpuestos por el gobierno fueron retirados en julio de 2007.

En octubre de 2007 a Bhutto se le permitió regresar al país como parte del proceso de reconciliación del régimen de Musharraf. Se decreto una Ordenanza de Reconciliación Nacional en la que Bhutto y su marido fueron eximidos de todos los cargos que pesaban sobre ellos y a cambio el Partido Popular de Pakistán (PPP) dio su apoyo al general en las elecciones presidenciales. El general Musharraf fue elegido presidente por otros cinco años mientras que todavía ocupaba la posición de Jefe del Ejército. El regreso de Bhutto anuló el impulso del movimiento de los abogados, el que demostró ser un poderoso oponente al general Musharraf. La Corte Suprema intervino y paró el anuncio oficial de los resultados electorales por parte de la Comisión Electoral de Pakistán.

En estos momentos el país se enfrenta a una dura resistencia por parte de los militares en la provincia fronteriza del noroeste. El general Musharraf impuso el estado de emergencia en el país en noviembre de 2007 suspendiendo todos los derechos civiles, secuestrando los canales de difusión de noticias y esta vez el Jefe de Justicia fue forzado al retiro. Al resto de jueces se les pidió renovar su juramento bajo la Orden Constitucional Provisional (PCO) y aquellos que se negaron fueron destituidos. Musharraf justificó sus actos como una garantía para la guerra contra los elementos extremistas. Sin embargo, había un descontento general en el país y en la comunidad internacional contra la estrategia del general.

A pesar de ser un aliado de la guerra contra el terror el presidente Musharraf estaba bajo presión para abandonar su puesto como Jefe del Ejército. Por lo tanto tuvo que anunciar la convocatoria de elecciones generales, su plan de retirase del ejército y el fin del estado de emergencia impuesto por él.

El país se encontraba otra vez en el camino hacia la democracia con una nueva Corte Suprema (elegida por Musharraf) y permitiendo a la Comisión Electoral de Pakistán declarar oficialmente los resultados de las elecciones presidenciales. Musharraf tuvo que bajar de su posición como Jefe del Ejército y prestar juramento como presidente civil. Fue establecido un gobierno interino para organizar las elecciones del país el 8 de enero de 2008. Al ex primer ministro exiliado Sharif se le permitió volver al país para liderar su partido. Fue entonces cuando se decretó el fin del estado de emergencia. Pero el 27 de diciembre de 2007, Bhutto fue asesinada por los disparos de un hombre armado no identificado quien seguidamente se inmoló accionando las bombas que tenia adosadas a su cuerpo ocasionando la muerte de otras 40 personas, después de un mitin electoral en Rawalpindi.

En las horas siguientes a su muerte, masas enfurecidas tomaron las calles y la violencia desatada se cobró más vidas a lo ancho y largo del país. Durante las protestas, muchos bancos, centros comerciales y establecimientos industriales fueron saqueados y las propiedades del gobierno y también privadas valoradas en millones de rupias fueron destruidas. Bhutto fue aclamada como mártir a pesar de sus cargos por corrupción y siguiendo sus últimos deseos, su impopular e infame marido Asif Zardari y su hijo de 19 años, un estudiante de una universidad británica fueron nombrados copresidentes del partido de Bhutto el PPP. No hubo elecciones dentro del partido para elegir a un nuevo líder y su deseo ciegamente cumplido de nombrar a su marido como el próximo presidente subraya el hecho de que ella no creía en la democracia para su propio partido. Su marido Zardari decidió nombrar a su hijo copresidente del partido. Cabe destacar que la constitución de Pakistán exige una edad mínima de 25 años para presentarse a las elecciones y obtener un cargo público y un mínimo de 35 años para llegar a ser primer ministro del país. Por lo tanto es evidente que el nombramiento del hijo de Bhutto como copresidente del partido no tiene fundamento político alguno excepto el hecho de mantener el liderazgo del partido dentro de la familia.

Su triste y violenta muerte de alguna manera sobrescribió su legado de corrupción, búsqueda de poder político y conspiraciones con la “lucha por la democracia”. Los medios de todo el mundo la han descrito como una heroína quien defendió la democracia. Los altercados violentos que siguieron a su muerte han supuesto una atención negativa sobre Pakistán y han provocado la vergüenza e indignación de los pakistaníes en todo el globo.

Para mantener el orden la policía recuperó algunas de las propiedades saqueadas en localidades densamente habitadas por seguidores de Bhutto. Las elecciones han sido pospuestas para el 18 de febrero de 2008. Los candidatos del partido de Bhutto el PPP se presentan en las campañas electorales como las víctimas de una tragedia e intentan sacar el máximo partido electoral de un acontecimiento muy triste. Existe un sentimiento generalizado de que su partido lo hará bien en las elecciones. Los opositores del presidente Musharraf alegan que el estado influenciará los resultados electorales amañándolos. Nadie parece preocuparse por el hecho de que el poder judicial ha sido destruido por el régimen de Musharraf y que a los jueces no se les permite enjuiciar al gobierno ni a los militares.

Las elecciones se acercan y los mejores deseos para Pakistán consisten en mantener los dedos cruzados. La esperanza real se encuentra en la gente de Pakistán quienes han resurgido más fuertes después de cada desastre. Los políticos corruptos y el ejército quizás ralenticen el proceso pero el coraje de la población pakistaní finalmente alcanzará su objetivo de un Pakistán Independiente y Democrático.

Salman Ali
profesional pakistaní en Boston, EEUU.
Blog: http://www.passionateaboutpakistan.blogspot.com/

NOTAS:

1. Quaid-e-Azam (significa el gran líder en Urdu) es el título comúnmente utilizado para designar a Mohammad Ali Jinnah – el Padre de la nación Pakistaní.

2. El Consejo Judicial Supremo es un cuerpo constitucional creado para atender las quejas contra jueces y contra la Corte Suprema.

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